
Si trabajas en trade marketing, canal moderno o retail, sabes perfectamente que uno de los problemas más comunes —y más costosos— es este:
El planograma se ve perfecto en PowerPoint… pero en tienda todo es distinto.
Un día encuentras tu exhibición impecable.
Al siguiente, está incompleta, mezclada o desplazada por la competencia.
Sucede en supermercados, farmacias, conveniencia, club, mayoristas… en cualquier canal.
Y lo más frustrante es que, aun cuando tus promotores visitan tienda:
Pero lo que sí existe son ventas perdidas, espacios mal aprovechados, agotados invisibles y negociaciones que se caen por no cumplir lo pactado.
Por eso, hablar de Planogram Compliance ya no es un “nice to have”.
Es la base para proteger tu inversión en PDV.

No es solo “seguir un dibujito”.
Tampoco es tomar una foto y enviarla al grupo.
Planogram compliance significa:
Es, básicamente, convertir el plan en realidad.
Y en México, donde la competencia hace movimientos diarios, el que controla su planograma controla su categoría.
Años apoyando marcas y agencias en retail nos muestran 6 causas críticas:
Aun dentro de la misma cadena, los equipos en piso hacen modificaciones “temporales” que después nunca regresan a la normalidad.
Las fotos llegan por WhatsApp, sin contexto, sin metadatos, sin nombre de tienda.
Cuando HQ recibe el reporte, ya pasaron días. Los errores siguen en tienda.
Muchos planogramas se entregan como PDFs pesados o imágenes confusas.
No existe un tablero único para verificar ejecución por región, cadena o equipo.
Excel, presentaciones, fotos sueltas… el caos completo.
Y por eso las marcas necesitan una herramienta que haga simple lo que antes era imposible.

Aquí el flujo más práctico —y usado por equipos de trade más maduros en LATAM— para lograr uniformidad real.
Nada de archivos enormes o PDFs ilegibles desde el celular.
Los mejores equipos usan:
Debe ser entendible en 5 segundos, no en 5 minutos.
Si el promotor tiene que abrir WhatsApp, luego buscar un PDF, luego tomar fotos… ya se perdió eficiencia.
Lo ideal:
Todo dentro de la misma app.
Planograma → Ejecución → Evidencia → Aprobación.
Ejemplo:
Con metadatos y ubicación. No fotos random.
El supervisor ve:
Sin esperar reportes de fin de semana.
Las marcas serias miden:
Sin esto, el planograma se convierte en una sugerencia… no en una ejecución real.

Shopl fue diseñado exactamente para esto.
El promotor puede ver:
Todo desde su celular.
Sin WhatsApp. Sin archivos sueltos.
Cada foto se guarda con:
Evidencia confiable = control real.
El sistema coloca pasos como:
Y va marcando cumplimiento.
HQ puede ver:
Es el sueño de cualquier gerente de trade marketing.
Olvídate de consolidar fotos o armar PowerPoints manuales.
Shopl genera:
Y con esto, el compliance deja de ser suerte… y se vuelve un proceso.
Empresas que estandarizan su ejecución ven:
No hay estrategia de trade más rentable.

El planogram compliance no es un tema de "perfeccionismo".
Es un tema de:
- Rentabilidad — Cada frente perdido es dinero que dejas de ganar
- Competitividad — El que controla su espacio, controla su categoría
- Credibilidad — Sin evidencia, no hay negociación
- Escalabilidad — No puedes crecer sin procesos repetibles
Y en México, donde la batalla por el PDV se gana o se pierde cada día, tener un sistema que garantice ejecución uniforme ya no es opcional.
Es la diferencia entre una marca que ejecuta… y una marca que solo planea.
La pregunta no es si necesitas planogram compliance.
La pregunta es: ¿cuánto más vas a esperar para implementarlo?